Por aquello de situarnos. Imaginemos e intentemos recordar el final de la década de los 70 y el advenimiento de los años 80. El Punk como negocio comercial agonizaba y la industria discográfica amén del resto de actores de la activa y bulliciosa escena musical huían de su legado de escándalos, de su pose cruda y "malota" como de la peste equina o la encefalopatía espongiforme bovina (¡¡Ahí queda eso!!)
Se produce un vacío en el nomenclátor musical y surge la apremiante necesidad de hallar un concepto, un nuevo término global que sirva de paraguas bajo el que aglutinar el amplísimo espectro de sonidos y estilos paridos por aquel entonces. Surge así la NEW WAVE, expresión claramente influenciada por la corriente cinematográfica francesa de finales de los 50 y acuñada por Ian Copeland (productor musical, cazatalentos descubridor de bandas como R.E.M. y representante entre otros de Squeeze, Simple Minds, The Police, The Cure los B-52's o Iggy Pop).
Aunque inicialmente se conservaron a modo de cordón umbilical las constantes vitales que mantenían los vínculos con el Punk, aquello derivó en un "todo vale" que abarcó y amparó subgéneros tan diversos como el Dark Wave de The Cure o Siouxie, el Dance Punk de los Lords of the New Church, el Reggae New Wave de The Police, los glamourosos New Romantics, la segunda oleada Ska de Madness o los Specials, el psicodélico Afterpunk de mis adorados Psychedelic Furs, el Art Pop de The Talking Heads o, por no extenderme más, la genuina efervescencia cool del Synthpop de los primeros Depeche, Soft Cell, Ultravox, Visage u Orchestral Manoeuvres In The Dark ..... y aquí me detengo, porque para algo son mis invitados hoy en el Blog.
Dúo éste cuyos miembros fundadores son Andrew McCluskey y Paul Humphreys, fervientes admiradores de Kraftwerk, claro expositor y abanderado de lo que aquí se definió como Tecnopop merced a una acertadísima mezcla de creatividad, equilibrado criterio en la composición, un ensamblado moldeaje en las voces, elegante elaboración de melodías, un interesante grado experimental y la palpable demostración de que se puede alcanzar el éxito aboliendo los patrones consumistas pero sin perder de vista la vis comercial.
Tras editar en 1980 un primer y estupendo disco de título homónimo, del que se extrajo como sencillo el maravilloso "Electricity", el grupo patina posteriormente un poco con un segundo trabajo algo más oscuro aunque muy rico en matices, como fue aquel "Organisation" que incluía en contraposición todo un enorme tratado de brillante sonido pop que les granjeó fama mundial y les aupó en las listas de ventas, "Enola Gay".
Y llegó entonces el punto de inflexión en su trayectoria allá por 1981 con este "Architecture & Morality", no tan experimental como sus publicaciones anteriores, rápido y efectivo destilando el aroma de melodías inspiradísimas y potenciando los sonidos synthpop con el uso del mellotrón, instrumento muy ligado al Rock Progresivo, que aportaba un amplio abanico de cuerdas y coros a las canciones.
Cuando afrontéis la escucha del disco rascad un pelín la primera capa y os daréis de bruces con el aluvión de recuerdos de himnos imperecederos como "Souvenir" o "Joan of Arc", de esos que forman parte de la memoria colectiva de toda una generación. Flotad en los atmosféricos pasajes de los apocalípticos sintetizadores, en el intimismo de sus armonías y disfrutad uno de los álbumes esenciales para llegar a comprender la música electrónica de los 80.
LISTA DE TEMAS.
01.- The new stone age.
02.- She's leaving.
03.- Souvenir.
04.- Sealand.
05.- Joan of Arc.
06.- Joan of Arc (Maid of Orleans).
07.- Architecture and morality.
08.- Georgia.
09.- The beginning and the ned.
MIL RAMOS DE BESOS.
